Alimentos Funcionales: Prebióticos y Probióticos La nutrición está hoy por hoy experimentando un cambio significativo. Tradicionalmente ha buscado aportar a través de los alimentos las correctas proporciones de nutrimentos básicos, tales como hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas, minerales así como las kilocalorías suficientes para satisfacer las necesidades orgánicas de cada uno de nosotros. En la actualidad este concepto clásico de nutrición equilibrada tiende a ser sustituido por el de nutrición funcional que además de hacer referencia a la capacidad de nutrir se refiere a la contribución que pueden tener algunos alimentos para promocionar la salud, mejorando el bienestar y reduciendo el riesgo de desarrollar ciertas enfermedades. Así surge el concepto de los llamados alimentos funcionales entre los que podemos mencionar los prebióticos y probióticos, palabritas que escuchamos cada vez más a menudo en los distintos medios de comunicación.
Alimentos Funcionales:
Los alimentos funcionales son los que gracias a sus componentes proveen beneficios a la salud más allá de la nutrición básica, es decir, producen un impacto beneficioso, clínicamente probado, sobre la enfermedad.
Estos alimentos mejoran el estado de salud, disminuyen el riesgo de contraer enfermedades y su consumo no posee efectos nocivos o dañinos. El alimento funcional debe incorporarse en la dieta en forma natural de preferencia y continua, y se debe complementar con una dieta balanceada y una actividad física cotidiana y practicada con gusto. Generalmente es posible encontrarlos en tiendas naturistas y supermercados.
Probióticos:
En condiciones normales tenemos una gran variedad de microorganismos viviendo en los intestinos y constituyendo la flora intestinal del ser humano. Muchas de estas bacterias son beneficiosas para nuestro organismo y conviven en equilibrio entre ellas. Si por algún motivo (por ejemplo la utilización de ciertos antibióticos) este equilibrio se rompe se pueden producir diversos trastornos intestinales. Por esta razón es importante mantener las funciones de las bacterias beneficiosas del intestino.
Los alimentos probióticos contienen bacterias, es decir son cultivos activos. Como ejemplos tenemos el queso y el yogurt que al contener lactobacilos y bifidobacterias ayuda al renovar la población de microorganismos benéficos en nuestro intestino. Al consumirlos nuestro sistema inmune se ve reforzado mejorando nuestra capacidad de prevenir o corregir problemas digestivos o enfermedades como el cáncer.
Este tipo de alimentos pueden también administrarse como suplemento alimenticio en cápsulas u otras presentaciones ya disponibles en las tiendas naturistas y supermercados.
Prebióticos: Son productos alimenticios no digeribles, tales como por ejemplo la fibra, que estimulan el crecimiento de las bacteria benéficas presentes en el colon. Como ejemplo podemos mencionar un azúcar llamado inulina que se encuentra en algunos vegetales como el ajo, la cebolla, puerro, espárragos, alcachofa, trigo, plátano y la achicoria.
Otros ejemplos de alimentos funcionales pueden ser: los huevos enriquecidos con ácidos grasos esenciales omega-3 que ayudan a reducir el riesgo de afecciones cardiacas, los cereales con ácido fólico que ayudan a reducir el número de niños que nacen con espina bífida y las margarinas con fitoesteroles que reducen el colesterol y disminuyen el riesgo de padecer afecciones cardiacas.
Amigo lector, los prebióticos y probióticos ayudan al confort digestivo, reducen la intolerancia a la lactosa, mejoran nuestras defensas, contribuyen a la prevención de cáncer y a la regulación de la movilidad intestinal.
No dejes de escribirme,Tu amiga nutrióloga Carmen Serdán ([email protected]).
Consejos de Carmen Serdán:
Ø Beneficios de los prebióticos y probióticos: Previenen y ayudan a tratar enfermedades como la diarrea, estreñimiento y exceso de gases, riesgo cardiovascular y diabetes, además de estabilizar y mejorar enfermedades que afectan al intestino como la de Crohn y la colitis ulcerosa. También mejorar la digestión y estimulan las defensas incrementando la resistencia a las infecciones.
Ø Los prebióticos son ingredientes no digeribles que tienen la propiedad potencial de mejorar la salud debido a que favorecen el crecimiento selectivo de bacterias intestinales beneficiosas. Los podemos encontrar en vegetales como ajo, cebolla, puerro, espárrago, alcachofas, tomates, plátanos y raíz de achicoria.
Ø Los probióticos son alimentos que contienen microorganismos vivos cuyo consumo tiene efectos positivos para la salud por su acción sobre la flora intestinal, pues promueven el desarrollo de bacterias beneficiosas y los encontramos en el yogurt y otras leches fermentadas y también en bebidas que contienen además de jugo, leche fermentada y cultivos de bacterias.